dijous, 6 de febrer del 2014

Ya me iba

Ya me iba. No sé dónde ni cómo pero me iba. Estaría bien poder encontrarme, porque creo que se ha fugado hasta la dulzura de mi mirada. Ahora tiene un gusto amargo, como el café sin azúcar. Sin azúcar me he quedado, pero porque tú has querido. Tengo sueño y los ojos muy abiertos, ¿qué es eso? ¿El café? Pues no, eres tú. Me gustaría entrar dentro de mí para poder coger todos los pedazitos y pisarlos bien fuerte, a ver si reaccionan que ya va siendo hora. Hora de comerme al mundo y no a mí. Pero ya no tengo hambre, al menos no de eso, bueno ni de nada. Siempre había creído que engañarse ayudaba pero no había pensado que mis mentiras quisieran ahogarme. Ahora sólo necesito aire. Aire endulzado a poder ser, que de amarguras ya he tenido bastantes.

En fin, que yo ya me iba, pero has vuelto tú.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada